El mensaje que Félix Peña, especialista en las relaciones con el Brasil, dejó a los empresarios mendozinos en su visita a Mendoza para una conferencia que organizó el Banco del Suquía es que el Mercosur continuará en expansión. Particularmente para los productos que hoy puede ofrecer nuestro país. "Pero no será un coto de cazada para los productos argentinos. Como tampoco nuestro mercado lo será para los productos brasileños", dijo. Porque indicó, los dos serán mercados abiertos al ingreso de la producción de otros pases, especialmente los más desarrollados, a los que -particularmente Brasil- está orientando sus ventas.
Y ante ese panorama, reitero lo que dije hace cinco años, cuando el Mercosur nacía: "ojo que esto va en serio; organícense".
El tema de la disertación del doctor Peña, en la Bolsa de Comercio, fue el acuerdo del Mercosur con Chile. Y en este tema también dejó consejos al auditorio, ante el cual fue presentado por Raúl Verzini, director del Banco del Suquía.
A la relación con Chile, y en un intervalo de su conversación con Verzini, el gerente general Juan Carlos Irazusta y Félix Carlos La Red, anterior a su conferencia, se refirió en una entrevista. La que luego de pedir la formación de un tribunal arbitran para el comercio bilateral con Chile, continuó con su nuevo análisis del mercado brasileño.
Tribunal arbitral con Chile
Dijo Peña que en la misma unión aduanera del Mercosur, y en la asociación del Mercosur con Chile, “siempre se van a producir problemas de tipo comercial. Está el actual el del ingreso de carnes argentinas en Chile. Y el problema se plantea porque cada parte expone argumentos distintos. ¿Qué nos dice la experiencia del NAFTA, del acuerdo de libre comercio entre Canadá y Estados Unidos, para no entrar ya en la más avanzada comunidad europea? Nos dice que es absolutamente necesario tener mecanismos objetivos de solución de controversias. Que permitan que, en última instancia, se pueda formar un tribunal arbitral. Y que este tribunal analice todos los antecedentes y llegue a la conclusión de que la razona una parte o a la otra", dijo.
"Esta es mi conclusión, pero referida al fondo del tema. Porque problemas siempre habrán. Hoy puede ser la carne, mañana otro producto. Y pasado mañana puede ser el caso de un producto chileno en la Argentina".
"No nos podemos quedar expuestos a negociaciones continuas sobre quién tiene la razón".
¿Cuándo podríamos llegar a tener tribunales arbitrales en el Mercosur y con Chile? Yo soy partidario de que sea lo antes posible. Una asociación como la que ha obtenido con Chile necesitaría un mecanismo de solución de controversias que tenga, como mínimo, las mismas características del protocolo de Brasilia, que establece tribunales ad hoc en el Mercosur. Y ya en estos días ha trascendido que se han planteado algunos casos de soluciones en el marco de este mecanismo.
"En el NAFTA, y entre Canadá y Estados Unidos, son ya muchos los casos que se plantearon y se han resuelto. Y en la misma Organización Mundial del Comercio ha ocurrido lo mismo, y están planteándose".'
"No hay que dejar la decisión a un funcionario"
Para el doctor Peña, la ventaja del mecanismo arbitral se advierte más no ya en el mismo intercambio, sino en la más importante área de las inversiones.
"Es un avance sustancial este sistema de soluciones. Lo es también desde el punto de vista práctico. Porque si alguien decide invertir en Mendoza, por ejemplo en el área fructícola, para penetrar en el mercado brasileño, o de Chile, arriesga capital. Y puede pasar que, de repente se encuentra con que el acceso al mercado que le habían prometido queda librado a la interpretación que eventualmente tenga un funcionario, y que pueda ser arbitraria, aunque señalo que no diga que siempre sea arbitraria.
"Puede ser la interpretación de un funcionario del servicio sanitario, de un funcionario del servicio aduanero, o de la interpretación que baga un ministro de hacienda o de economía de cualquiera de los países socios, sobre lo que es una emergencia económica.
Y entonces el inversor se queda con que no tiene el mercado que le habían prometido.
"Las claves del Mercado Común Europeo, las claves del NAFTA, son que nadie le puede quitar el mercado que le habían prometido. Y si se lo quitan, es de acuerdo con procedimientos y mecanismos preestablecidos y conocidos. Por ejemplo, cláusulas de salvaguardia, mecanismos de emergencia, etcétera.
“Todo esto significa plata. Por eso mi conclusión, luego de la experiencia que tuvimos con la firma del acuerdo con el tema de las carnes-sin entrar a analizar el tema en sí mismo, porque no soy especialista, ni lo he analizado- es que indica que debemos avanzar rápido en el mecanismo de solución de controversias. Y con Chile, como mínimo con la aplicación del Protocolo de Brasilia".
Mensaje a los empresarios
Al pedírsele un mensaje a los empresarios, y particularmente los mendocinos, sobre el Mercosur y la asociación con Chile, expresó:
"Como analista, diría hoy lo mismo que dije cuando me tocó la responsabilidad de colaborar con el gobierno entre 1991 y 1992, en el momentos de despegue del Mercosur y como funcionario de la Cancillería encargado de estos temas. Se lo transmití entonces al sector privado.
"Lo que le transmití es, primero, ‘tomen esto en serio; la cosa va en serio’. Y lo segundo, "organícense desde ya, para sacar provecho del Mercosur, y del mercado brasileño que es el principal. Es un mercado grande, complejo, y si no lo trabajan desde ya no podrán posicionarse allí. |