PRIMERA PARTE, CAPÍTULO I
El conflicto entre Cuba y el sistema interamericano
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A - Origen y primeras manifestaciones del conflicto. Pausas fundamentales.
El 19 de enero de 1959, el Ejército Revolucionario de Cuba,
comandado por Fidel Castro, derroca al gobierno de Fulgencio Batista.
En todos los países americanos, el triunfo de la revolución
cubana es acogido con júbilo y se señala en el hecho una
nueva etapa en la lucha por la "democracia y la libertad".
En el primer año de gobierno revolucionario, diversos actos
de política interna, y la orientación de la política
internacional del mismo, originan una situación conflictiva con
algunos gobiernos americanos, que a partir de entonces no cesa de agravarse.
En particular el área del Caribe es afectada, a partir de 1959,
por una serie de conflictos políticos y militares; y concretamente
tres gobiernos, el de Panamá, el de Nicaragua, y el de la República
Dominicana, denuncian al Consejo de la OSA, invasiones o proyectos de
Invasiones operadas por exilados, y cuyo objetivo era el de derrocar
los gobiernos respectivos. En cada uno de estos casos el gobierno revolucionario
de Cuba se encuentra comprometido [1].
El conflicto es particularmente agudo con los Estados Unidos. Analicemos
entonces, cuales son en este período, los principales factores
de tensión entre Cuba y los Estados Unidos.
Podemos distinguir cuatro factores principales de tensión:
(a) las medidas económicas adoptadas por el gobierno revolucionario,
que afectan intereses privados norteamericanos en Cuba;
(b) los actos cometidos contra ciudadanos norteamericanos residentes
en Cuba, y que son considerados como arbitrarios por el gobierno de
los Estados Unidos);
(c) la existencia de la base naval americana de Guantánamo,
cuya devolución es exigida por el gobierno cubano al de los
Estados Unidos; y
(d) los diversos incidentes que afectan de una manera u otra a representantes
diplomáticos de los Estados Unidos en territorio cubano.
La estrecha dependencia económica de Cuba hacia los Estados
Unidos, traducida en la orientación de su comercio exterior y
en la inversión en territorio cubano de importantes capitales
americanos, permiten considerar que son las medidas de índole
económica adoptadas por el gobierno cubano (factor a) la causa
principal de tensión entre los dos gobiernos. Los otros factores
y en especial, los señalados en (c) y (d) pueden ser considerados
consecuencia de la tensión originada por la política económica
revolucionaria.
Analizaremos brevemente las principales medidas que originan y agravan
el conflicto económico y político cubano-norteamericano.
La primera manifestación visible del conflicto, es dada por la
reacción del gobierno de Estados Unidos expresada en una nota
dirigida el 11 de junio de 1959 por el Departamento de Estado al gobierno
cubano, como consecuencia de la nacionalización de plantaciones
de caña de azúcar que afectan capitales norteamericanos,
y que es decretada en virtud de la reforma agraria dispuesta el 17 de
mayo de ese año. El Departamento de Estado declara que espera
que dichas nacionalizaciones den lugar a "una compensación
adecuada, rápida y equitable". El gobierno cubano responde
el mismo 12 de junio que la única compensación prevista
consistiría en obligaciones públicas a 20 años
y con un interés máximo del 4 y medio por ciento [2].
En el transcurso del año 1959 otras medidas de nacionalización
son dispuestas en el sector azucarero, que dan lugar a notas de protestas
del gobierno de los Estados Unidos [3]. En el sector de la industria
petrolera, la situación comienza a deteriorarse a partir de la
ley del 27 de octubre de 1959 que fija el estatuto de las compañías
petroleras extranjeras, y especialmente por la ley del 22 de noviembre
del mismo año que obliga a dichas compañías a explotar
sus concesiones bajo pena de perder sus derechos, limitando además
la extensión de las concesiones y el porcentaje de los beneficios.
Es necesario anotar que las principales compañías petroleras
que trabajaban en Cuba eran de origen norteamericano [4].
Dos medidas dispuestas por el gobierno de Washington contribuyen a
agravar la tensión existente entre los dos países. En
efecto, el 14 de mayo de 1960 se dispone la suspensión de la
ayuda financiera americana a Cuba, y el 6 de julio del mismo año
al presidente Eisenhower promulga la "Sugar Act" que le autoriza
a reducir sustancialmente la cuota de importación de azúcar
correspondiente a Cuba. A la primera de las dos medidas, el gobierno
cubano responde con una advertencia en la que deja entrever la posible
expropiación completa de los bienes norteamericanos radicados
en Cuba. A fines del mes de junio, y habiendo sido aprobada ya la nueva
ley del azúcar por el Congreso Americano, el gobierno cubano
tras atacar dicha ley procede a la nacionalización de las refinerías
de petróleo americanas que se hablan negado previamente a refinar
petróleo de origen ruso [5].
El 6 de julio del mismo año, el gobierno cubano aprueba el principio
de expropiación de todos los bienes y empresas en los cuales
ciudadanos americanos tuvieran intereses mayoritarios, y en todos los
casos en que esta expropiación se justificará en defensa
del interés nacional. El gobierno cubano presenta esta medida
como una respuesta a "los actos de agresión económica"
provocados por el gobierno americano, y especialmente se refiere a la
nueva cuota de importación de azúcar atribuida a Cuba
[6]. La indemnización a pagar en los casos de expropiación
sería en bonos del Tesoro con un interés anual del 2%.
La nota de protesta presentada por el gobierno de los Estados Unidos
como reacción a la nacionalización de las refinerías
de petróleo, también se basa en que el gobierno cubano
ha provocado una "agresión económica" contra
los Estados Unidos.
Ella dice en su último párrafo que "el gobierno
de loe Estados unidos no puede evitar de estimar con profundo desagrado
que la ocupación de las refinerías es una nueva prueba
y la confirmación de una política incesante de agresión
económica, llevada a cabo por el gobierno de Cuba contra los
Estados Unidos y otros países; política que no puede sino
conducir a la destrucción de las inversiones tradicionales y
de las relaciones comerciales de Cuba con el mundo libre" [7].
Para una mejor comprensión de la crisis a qué da lugar
esta serie de medidas de carácter económico adoptadas
por los gobiernos, cubano y norteamericano, debemos recordar que en
el mismo período, la política exterior cubana es orientada
hacia la Unión Soviética. En mayo de 1960 el Ministro
de Relaciones .exteriores de Cuba, Sr. Raúl Roa, anuncia el restablecimiento
de relaciones diplomáticas con el gobierno de la URSS. El 18
de junio del mismo año, se firma un primer acuerdo comercial
a largo plazo entre Cuba y la Unión Soviética. El 9 de
julio de 1960, en plena crisis de la "guerra económica"
cubano-americana, el primer ministro de la URSS declara, refiriéndose
a la situación cubana: "hablando figuradamente, en caso
de necesidad, los artilleros soviéticos pueden apoyar al pueblo
cubano con el fuego de sus cohetes, si las fuerzas agresivas del Pentágono
se atreven a iniciar una intervención contra Cuba". Esta
declaración del jefe del gobierno soviético, tiene una
importancia particular, pues significa una intervención extra-continental
contraria a los principios del Sistema Interamericano. Como veremos
más adelante, el hecho de que Cuba aceptara esta declaración
soviética tendrá una repercusión en la decisión
de la Octava Reunión de Consulta [8].
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[1] Cf. Thomas and Thomas, "The Organization of American States".
Southern Methodist University Press: Dallas, 1963, pp. 316 ss., así
como la referencia a la situación que conduce a la realización
de la Quinta Reunión de Consulta en Santiago de Chile.
[2] Cf. ROUSSEAU, Charles, "Chroniques des Faits Internatio-naux",
en Revue Genérale de Droit International Public, Vol. LXV, 1960,
pp. 340 a 351: "Cuba et Etats-Unis: Rupture des relations diplomatiques
entre les deux gouvernements"; igualmente "Le Monde"
de París, 25-IX-1959.
[3] Cf. ROUSSEAU, Charles, op. cit. p. 341; sobre la política
de nacionalizaciones seguida por el gobierno cubano y las reacciones
que ella produce en los Estados Unidos, cf. NAUDON, Carlos, "América
Impaciente". Santiago de Chile, junio 1963, p. 69.
[4] Cf. ROUSSEAU, Charles, op. cit., p. 342; "Le Figaro"
de París, 23-XI-1959.
[5] Cf. Annuaire Francaise de Droit International, "Chronique
des Faits Internationaux". año 1961; asimismo ROUSSEAU,
Charles, op. cit., pp. 341-42; "Le Monde" de París,
7-VII-1960; igualmente "Documents on International Affairs"
19,60, Oxford University Press, 1964, especialmente pp. 532-33: "Statement
by president Eisenhower regarding US-Cuba relations, 20 january 1960";
y pp. 561-62, "President Eisenhowers Statement regarding the Sugar
quota, 6 july 1960"; sobre los mismos temas, ver "Documente
on American Foreing Relations" (1960), published by Council on
Foreing Relations, New York 1961, pp. 470-72 y pp. 474-75.
[6] Cf. ROUSSEAU, Charles, op. cit. p. 343.
[7] Traducido de "Le Monde" de París, 7-VII-1960.
[8] Sobre este párrafo consultar, THOMAS and THOMAS, op. cit.
p. 318 y fuentes allí citadas. Además la documentación
concerniente a este aspecto en "Documents on International..."
cit., pp. 553-34, pp. 563-4 (discurso del 9 de julio de 1960 del primer
ministro de la URSS) y pp. 564-5 (discurso del mismo día del
presidente de loa EE.UU. en que responde a la amenaza contenida en el
discurso antes citado); y en "Documents on American..." cit.
espec. pp. 476-78.
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